lunes, 20 de abril de 2009

10 cosas que le inflan la venita de la sien a cualquiera:

1) Estar bañandose y darse cuenta de que ya no queda shampoo

2) Que Direct TV se corte mientras llueve

3) Que los inocentes niñitos hagan ring-raje mientras uno está durmiendo (!)

4) Que las mejores películas las pasen después de las 12

5) Que la gente hable por MSN y no tenga nada para decir, limitando la charla a un: hola, ¿qué tal?; bien, ¿vos?; bien; (...).

6) Que justamente antes de tener que salir, alguien se meta a bañar, teniendo que usar uno el baño todo empañado y elevando el nivel de frizz unos 5 metros sobreelniveldelmar.

7) Aquellos que tiran la piedra (via chamuyo) y luego esconden la mano (via "vos me malinterpretaste").

8) Las pseudo-viejas con tacos de 10cm que se quejan porque no se les brinda el asiento en el colectivo.

9) Que la barrera del Telepeaje no se levante.

10) Las películas con final bollywoodense en donde todos son felices y comen perdices aunque sean más inverosímiles que el monorriel de Springfield.

sábado, 18 de abril de 2009

Tipo de hombre Vol.5

El optimista: Inofensivo pero monótono. Siempre con la sonrisa de Ronald McDonald. Argentina pierde el mundial; él, sonriente. El banco, por corralito o corralón, le retiene los ahorros, y él, sonriente. Se le pincha una goma al auto en la ruta 41 partido de Loma hermosa (que de hermosa solo tiene el nombre); y él, cómo era de espertar, ¡está sonriente! No se sabe si él está más allá, superado, si es prototipo del superhombre Nietzscheano, o si realmente es un Muppet de sonrisa inamobible. Y ojo al piojo, este hombre, debido a su inofensividad, puede llegar a resultar peligroso. ¿Cómo? Y…es capaz de desatar la violencia que como buena samaritana una guarda bajo el tapete o deja en la puerta de la clase de yoga. Este hombre, obviamente, que los hay los hay, hace saltar la térmica y, aún peor, nos obliga a reprimir la ira. Una realmente no puede enfurecerse con un simple y simpaticón optimista. Muy interna-y oculta-mente deseamos que fuera el típico-hombre-basura, al menos para tener un pretexto de queja. Paradójicamente, él es todo lo contrario. Entonces, vale preguntar, ¿es posible que las mujeres a lo largo de los años hayamos incorporado un “chip” que solo nos permite buscar hombres que sabemos (sobre la base fáctica de su prontuario) que nos van a lastimar?; ¿será que lo hacemos porque de antemano nos figuramos una posible ruptura, de modo que podríamos fácilmente excusarnos sobre la base de sus ya conocidas y “reprochables” características?; O, ¿será que Holly(bolly)wood nos lavó de tal manera el cerebro que nos acostumbramos a sufrir y a incorporar la absurda idea de que con llanto de por medio las relaciones son más interesantes? En fin, ¿habremos hecho al melodrama parte de nuestras vidas? Estas preguntas llevan, inevitablemente, a vislumbrar el famoso síndrome de la gataflora. Ya nada nos llena y al sentirnos vacías en lo que encontramos, nos remitimos a encontrar aquello que nos lastima como manera de justificación del hecho de que luego cuando encontramos algo que nos place, no lo podemos manejar. Y ahí, ¡zás! El gran comodín utilizado como excusa es: tuve malas experiencias con los hombres, me lastimaron mucho. Y claro mujer, si vos misma inclinaste y extendiste la relación hacia ese sufrimiento y finalmente cuando apareció aquel hombre que valió la pena, te pusiste las botas de la gataflora y otra vez, the show must go on, encarnaste su papel a la perfección. ¿Qué tiene que ver esto con el optimista? Que tal vez tengamos que aprender un poco (¡solo un poco!) de él, dejar el drama a un costado y darle luz verde a las causas y azares. Apreder de un ser no es un aliciente para relacionarnos con él, simplemente podemos ser espectadores conformando una cuarta pared. Ah, sí, y, ¿el raid de la gataflora? Amor Fati, es decir, la complacencia con las decisiones que uno mismo tomó. A veces, todo no se puede. Y se corre con una ventaja, porque...¿más sabio que uno para elegir sobre la propia vida, quién?

viernes, 17 de abril de 2009

Tipo de hombre Vol.4

El toquetón: Músico frustrado, lo gusta tocar 24/7. Le hablás sobre la inseguridad, te toca una goma; le hablás sobre las elecciones de la UCR, te toca la otra. Las manos de este hombre y tu cuerpo son polos opuestos que se atren. Vos no sabés si te escucha o no, él solo quiere tocar. Aunque…¡Vamos! las reglas de la pareja son un mundo aparte. Si él es toquetón y a ella le gusta el toqueteo, mejor imposible. Pero…todo tiene un límite, y el toquetón de pura raza no se puede resistir. ¿Hasta cuándo dura la paciencia? Hasta que que él empieza a desplegar sus tentáculos en público. Estás con tus amigas, bueno, le dirigís una mirada y él desiste (o eso esperamos). Pero ya los límites empiezan a perder flexibilidad cuando te toca delante de tus viejos, de los nonos, de tu jefe, de todo el mundo. ¿Qué onda, flaco?; ¿es primavera y estás en celo? No, ni el día, ni el horario, ni la receta de los sconnes afrodisíacos de la abuela tienen importancia; no hay nada que hacer, el toquetón ha nacido toquetón y así morirá, intentanto tocar, tocar y tocar.

jueves, 2 de abril de 2009

Coin your catch-phrase

*Charlotte: How can you forget a guy you've slept with?

Carrie: Toto, I don't think we're in single-digits anymore.

*Charlotte: I am so confused. Is he gay or is he straight?

Carrie: Well, it's not that simple anymore. The real question is, is he a straight gay man or is he a gay straight man?

Carrie : The gay straight man was a new strain of heterosexual male spawned in Manhattan as the result of overexposure to fashion, exotic cuisine, musical theatre and antique furniture.

*Carrie: So are you saying there's no way you'd go out with a guy who lived with his family

Samantha: Well... maybe Prince William.

*Carrie: I've spent $40,000 on shoes and I have no place to live? I will literally be the old woman who lived in her shoes.

*Carrie: When did being alone become the modern-day equivalent of being a leper? Will Manhattan restaurants soon be divided up into sections, smoking/non-smoking, single/non-single?